La asociación lleva a cabo un proyecto con el que ayuda a jóvenes menores de 30 años, que ni estudian ni trabajan, a labrarse un futuro laboral.
La generación millennial ha escuchado hasta la saciedad que el camino correcto es llegar a la Universidad, por eso cuando alguno ha optado por escoger otra senda -igualmente válida- ha sido señalado y etiquetado con un “no vale”, “no sirve” o “no es lo suficientemente bueno”. Por miedo al rechazo multitud de jóvenes siguen el “colegio-instituto-universidad” como un caballo con anteojera y cuando finalizan los estudios de grado se preguntan: ¿y ahora qué?
A Jaime esa cuestión le golpeó mientras estudiaba la carrera de Historia. Conoció la asociación Arrabal-AID y su programa El viaje de tu vida, que le mostró que el tiempo que durase su stand-by académico no lo había perdido, “sino invertido”. Y esa es la clave para Jaime, porque “es tan importante darte cuenta de lo que te gusta, como de lo que no”. Y Arrabal le ayudó a eso precisamente, a conocer qué inquietudes se movían dentro de él, y fue cuando descubrió que la hostelería podía ser una salida cuando hizo los cursos que ofrece la asociación para jóvenes menores de 30 años, que necesitan respirar hondo y, quizá, cambiar de rumbo.
Tras la mentorización con sus tutores, comenzó las prácticas en una cadena de restauración y ahora acaba de firmar su primer contrato. Asegura que en algún momento retomará los estudios, aunque no sabe si finalizará el grado o los redirigirá a la hostelería.
Romina Merlos, sin embargo, buscaba “algo más”. Avanzar en el mundo de la hostelería, donde llevaba más de 12 años trabajando, y gracias a internet descubrió la asociación. Ahora está a punto de abrir su propio negocio en Torremolinos. “Mucha gente tiene miedo al no” y por eso no lo intentan. Arrabal “me ha ayudado a tener más confianza en mí misma, a pensar que yo puedo y a sentirme más segura. Me han apoyado en todo lo que he necesitado y ahora estoy preparada para dar el paso”, asegura.
En una línea similar se encuentra Daniel, un joven de 29 años que escogió la informática como forma de vida y la asociación le está acompañando en ese viaje. Tras acabar un curso de frontend del programa Red.es, junto a otros compañeros, Arrabal les propuso formar parte de un experimento social, que consistiría en dar soporte web tanto a emprendedores como a diferentes asociaciones y pequeñas empresas. Así nació 7nyxdevelopers, que en la actualidad se encuentra en fase de desarrollo y captación de clientes. Las instalaciones de la asociación han ejercido como incubadora y los mentores les han ido aconsejado a cada paso que daban. “Nos aportaban experiencia y nos ofrecían un entorno controlado”, mantiene Daniel, quien espera que el proyecto “salga bien” y puedan asentarse.
Arrabal enseña que el camino correcto de cada uno es el que le gusta. Aunque suene a tópico. Y que no siempre hay que estudiar una carrera para ser un gran profesional. “A los jóvenes les falta motivación”, sostiene Estefanía León, técnica de autoempleo en la Asociación Arrabal-AID. “El sistema educativo tiene que guiar a los alumnos y ofrecerles herramientas que motiven, además de mostrar otras vías”. En España “hay mucho talento, pero hay jóvenes que no encuentran su hueco en el sistema”, apunta Estefanía, quien critica que “a la juventud de ahora nos tachen de ninis, pero sin embargo, no nos motivan”.
La técnica de autoempleo explica que El viaje de tu vida es un programa que llevan a cabo la Fundación Incyde, el Fondo Social Europeo y la Asociación Arrabal-AID, y que tiene como objetivo general fomentar el emprendimiento entre la juventud malagueña y gaditana que “ni estudian, ni trabajan”, como vía para su incorporación al mercado de trabajo. Este proyecto contempla cuatro actuaciones principales como son formación presencial, prácticas en empresas, mentorización y formación on line.
La edición de 2016 culminó con 115 personas formadas, 81 planes de empresas, más de 1.000 horas de tutoría, 6 jornadas de animación con más de 500 participantes y 546 horas de mentorización empresarial para 46 jóvenes. Son algunos datos de un proyecto que se desarrolla en Málaga y Cádiz y que ha ofrecido formación on line para 357 personas.
Solo hay que tener una idea y muchas ganas de querer hacerla realidad, inscribirse en el programa de la asociación y dejarse aconsejar para empezar a crear un futuro que se ajuste a la profesión que te apasione.